jueves, 29 de mayo de 2008

CRISIS ALIMENTARIA


Crisis alimentaria "será larga"
La crisis mundial provocada por el alto precio de los alimentos será más larga de lo previsto, advirtió la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

La FAO dice que el aumento de precios no se debe a una escasez de productos básicos.
Durante la clausura de la Conferencia Regional celebrada en Brasilia, el director del organismo, Jacques Diouf, enfatizó que los gobiernos no pueden confiar en las fuerzas del mercado para contrarrestar la subida de los precios de los alimentos, y que se requerirá una clara voluntad política para aumentar la producción del agro.
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Diouf explicó que el aumento vertical de los precios de los alimentos no se debe a una escasez de productos básicos, sino a una conjunción de factores tales como el aumento de precios de los fertilizantes, y del petróleo.
En el año 2007 los cereales registraron un aumento del 41%; los aceites vegetales un 60%, y los productos lácteos un 83%.

La FAO afirma que es necesario redoblar la ayuda alimentaria a los países más pobres.
La tendencia no se ha revertido, y más bien parece acelerarse.
Entre marzo de 2007 y marzo de 2008, el precio de venta del trigo (materia prima para el pan, entre otros) se disparó 130%.
"Especulación"
Diuof también señaló el papel de los "especuladores" en esta crisis, que se han lanzado a "buscar oportunidades" en los mercados de materias primas y de alimentos.
Según dijo, muchas se veces se cree que los altos precios presionan un aumento de la producción, pero advirtió que en este caso eso no va a ocurrir.
"En los países pobres los agricultores se enfrentan a dificultades para tener acceso a semillas, fertilizantes y alimento para el ganado", aseguró.
El funcionario dijo que la única manera de atacar el problema es brindando ayuda alimentaria a las países más pobres de Asia, África y América Latina.
América Latina y el Caribe

Los países pobres tendrán problemas para acceder a alimentos, fertilizantes y semillas.
Por otro lado, desde Santiago de Chile, el secretario ejecutivo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), José Luis Machinea, aseguró "que el alza persistente de los precios internacionales de los alimentos está castigando con especial dureza a los sectores más pobres de América Latina y el Caribe".
Según el organismo regional, las tendencias indican que ahora habrá 15,7 millones de indigentes adicionales en latinoamérica a consecuencia del alza.
"La pobreza y la indigencia aumentará de no tomarse medidas urgentes para aminorar los efectos de estas alzas", dijo Machinea en un comunicado.
Según la CEPAL, si se confirma un aumento de los precios estimado en un 15%, la indigencia en la región crecerá de 68,5 millones a 84,2 millones de personas.
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"Esto representa una situación dramática para un vasto contingente de personas", aseguró Machinea.
La CEPAL también cree que si se mantienen las tendencias de un aumento de los ingresos familiares a una tasa del 5% anual, irremediablemente unas 10 millones de personas pasarán a la indigencia debido al incremento de los precios de los alimentos, esto sin contar a los que pasarán a ser pobres, que según la CEPAL, será una cifra similar.
Además a esto habría que agregar "el agravamiento de la situación social de las personas que previo a estos aumentos ya vivían en la pobreza e indigencia", dice el comunicado.
Biocombustibles
El director de la FAO se negó a opinar sobre el papel que pueda estar jugando en la crisis mundial de los precios de los alimentos la producción de biocombustibles, y dijo que el tema será abordado en una conferencias especial que se celebrará en Roma, en el mes de junio.
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El presidente Lula niega que los biocombustibles sean la causa del aumento de precios.
Muchos expertos consideran que la creciente demanda de materias primas tales como maíz o caña de azúcar para la producción de combustibles de origen vegetal, ha influido de manera determinante en el alza mundial de los precios de los alimentos.
En el continente, Brasil y Estados Unidos son los principales productores de los llamados "combustibles verdes", con cerca del 90% del mercado mundial.
Ambos países aseguran que el objetivo es obtener energías renovables en el futuro que reduzcan la dependencia petrolera.
No obstante, esta política les ha generado críticas de los gobiernos de Cuba y Venezuela, que consideran que la siembra de la tierra sólo debe hacerse para obtener comi


Finaliza cumbre alimentaria en Roma con acuerdo de último minuto

Con más buenas intenciones que resultados, la Conferencia sobre Seguridad Alimentaria Mundial concluyó hoy aquí con la aprobación de una Declaración Final, luego de tres días de negociaciones.Este acuerdo reconoce la urgencia de combatir la crisis alimentaria, aunque fue criticado por algunos gobiernos y Organizaciones No Gubernamentales.Sin embargo, organizaciones internacionales y gobiernos comprometieron recursos contra la crisis por más de siete mil millones de dólares, según el director general de la FAO, Jacques Diouf.La reunión comenzó el martes pasado en la sede de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).En el evento intervino el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, quien recordó 'la severidad y la escala de la crisis alimentaria global'.Asimismo, advirtió que este problema mundial representa una 'amenaza evidente', pero también la oportunidad para revisar las políticas del pasado.Ki Moon dijo que la situación no se pude resolver con políticas 'puramente asistenciales', porque las mismas sólo provocan distorsiones de los mercados e impulsan los precios aún más al alza.Urgió a dar una respuesta 'inmediata' y a largo plazo al aumento de los precios de los alimentos, mejorando la seguridad alimentaria. Señaló que antes de 2030 el mundo necesita aumentar un 50 por ciento la producción alimentaria para poder hacer frente a la demanda.En otra intervención, Ki Moon reconoció que aún hacen falta estudios en profundidad para conocer el impacto de los biocombustibles en el medio ambiente y en la agricultura.El presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, advirtió que la crisis alimentaria puede llevar a 100 millones de personas a la pobreza y que la amenaza no incluye sólo a Africa, sino también a países como Haití u Honduras.Zoellick mencionó tres puntos de acción: el primero es la atención de las necesidades de los 20 países más afectados, y el segundo la distribución de semillas y fertilizantes a pequeños agricultores a países subdesarrollados.El tercero es la eliminación de barreras proteccionistas y restricciones a exportaciones.'Hemos establecido un plan de 10 puntos que se concentra en el corto y largo plazos y que reconoce que el nexo entre energía y alimentos significa que los precios se mantendrán altos', acotó.Por su parte, la directora ejecutiva del Programa Alimentario Mundial (PAM), Josette Sheeran dijo que el aumento de los precios del petróleo ha tenido una 'importante' influencia en la actual crisis alimentaria.Casi medio centenar de jefes de Estado y de Gobierno participaron en la cumbre, entre ellos los de Egipto, Francia, España, Italia, Argentina, Brasil, Irán y Zimbabwe.El encuentro tuvo como objetivo promover un plan de acción global para garantizar la seguridad alimentaria, afrontar los cambios climáticos y reglamentar la producción de biocarburantes.De hecho los biocombustibles estuvieron en el centro de la atención y el presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula Da Silva dijo durante su intervención que éstos no son los 'villanos'.Afirmó que los biocombustibles pueden ser un instrumento para generar ingresos y salvar a países de la inseguridad alimentaria y energética.Sin embargo, se pronunció contra la producción de etanol a partir del maíz u otros alimentos, aunque el uso del grano para fabricar biocombustibles fue defendido por el secretario de Agricultura de Estados Unidos, Ed Schafer.Entre las causas de la escasez de alimentos la presidenta de Argentina, Cristina Kirchner y el vicepresidente de Cuba, José Machado Ventura, señalaron las condiciones impuestas por organismos multilaterales de crédito a los países.Kirchner también acusó al protecionismo de las naciones más desarrolladas y recordó que fue el Fondo Monetario Internacional (FMI) el que recomendó a Haití abandonar la producción de arroz.Agregó que después de haber tomado esa decisión, actualmente Haití se enfrenta a una crisis alimentaria grave.Machado Ventura acusó a 'los países del Norte' de haber impuesto 'la liberalización comercial entre actores claramente desiguales'.Añadió que 'las recetas financieras de ajuste estructural provocaron la ruina de muchos pequeños productores en el Sur'.Para los participantes del foro paralelo de Organizaciones No Gubernamentales (ONG), Terra Preta, la cumbre fue sustancialmente un fracaso para los pequeños productores del mundo, que fueron prácticamente excluidos de la discusión.'Los gobiernos decidieron vaciar la legitimidad del espacio de la FAO como defensora de la seguridad alimentaria y en la que éstos pueden participar y tener un voto', dijo Flavio Valente, secretario general de la organización FIAN International.Señaló que en la Declaración Final no se habla de la especulación financiera que ha sido una de las causas de la crisis alimentaria.Según la iraní Maryam Rahmanian, de la organización CENESTA, la declaración de la cumbre no servirá ni para llenar 'un plato de comida'.Herman Kumara, representante del Foro Mundial de los Pescadores de Sri Lanka, dijo que la cumbre sólo tendrá resultados positivos para las multinacionales que dominan la distribución de alimentos en el planeta.El acuerdo de la Declaración Final se 'atoró' debido a los cuestionamientos de varios países latinoamericanos, como Cuba, Venezuela, Argentina, Bolivia, Nicaragua o Ecuador.Los cubanos denunciaron la falta de compromiso de Washington y dijeron que el texto carece de un diagnóstico objetivo sobre las causas esenciales del hambre.Por otra parte, los argentinos criticaron el hecho de que el texto no hablara contra los subsidios a la agricultura de los países ricos.